El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su par ruso, Vladimir Putin, se encontrarán este viernes en la base militar Elmendorf-Richardson, en Anchorage (Alaska), para discutir una hoja de ruta hacia un posible armisticio en Ucrania.
La cumbre se realiza sin la participación de Volodimir Zelensky, quien rechazó las condiciones impuestas por Moscú, que incluyen la anexión de las regiones ocupadas (Donetsk, Luhansk, Kherson, Zaporizhzhia y Crimea) como requisito para la paz.
Trump mostró disposición a considerar las demandas de Putin, lo que generó fuertes críticas desde Europa, donde líderes como Macron, Meloni, Merz y Starmer respaldan la posición ucraniana y se oponen a cualquier cesión territorial.
El encuentro será exploratorio, y Trump escuchará directamente las propuestas rusas, tras haber recibido un memo confidencial a través del enviado especial Steve Witkoff. Sin embargo, el mandatario estadounidense ya adelantó que habrá “intercambios de tierras” como parte de una eventual solución, lo que tensó su relación con Zelensky.
La cumbre marca el primer cara a cara entre Trump y Putin desde el G20 de Osaka en 2019. Aunque Putin busca romper su aislamiento internacional, y Trump aspira a posicionarse como mediador global, las condiciones de ambas partes son incompatibles por ahora.
El resultado de la reunión será clave para definir si habrá un nuevo proceso diplomático multilateral o si persistirá el estancamiento en la guerra de Ucrania.
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