El Facebook de la concejal Romina Arroyo fue testigo involuntario de un pase de facturas entre dos funcionarias, una provincial y otra municipal.
La concejal había consultado a sus seguidores en vistas a un Plenario a realizarse en el Concejo Deliberante sobre la obra de construcción de las bicisendas, a la que se encuentra abocada la intendenta Bettina Romero.
Concretamente la pregunta iba dirigida a un sector de esa obra y señalaba: «La Municipalidad hace estacionamientos para bicicletas en calle Belgrano y Mitre. Qué opinan?» Inmediatamente la edil cosechó un sinnúmero de comentarios en su mayoría negativos hacia la obra en proceso.
Si bien la consulta era dirigida a los vecinos, algunos funcionarios municipales como la Secretaria de Planeamiento María del Carmen Angulo, intentaron intervenir para morigerar los comentarios adversos sin lograr el cometido.
Pero lo que llamó la atención fue que ante la intervención de la Directora del Museo de Arte Contemporáneo Claudia Lamas opinando que le parecía inconveniente un estacionamiento en esa esquina, y que había que cuidar el casco histórico, sorpresivamente recibió la respuesta de la propia Coordinador de Comunicación municipal Agustina Gallo quien le espetó: «si sos funcionaria de cultura y viendo tu interés por la participación ciudadana y los años que llevas en la gestión de museos sería bueni (sic) q pensemos igual en todos los ámbitos. Me refería a la instancia participativa en el ámbito de la cultura que tanta falta hace».
Lo que no esperaba Gallo -que de la bronca se tragó pautas de redacción y puntuación- fue la respuesta de la directora del MAC quien fue contundente con lo que parece una vieja costumbre de la trabajadora municipal: no responder las llamadas ni mensajes telefónicos: «ahh, y que bueno leerte. Ya que no me respondiste nunca mas el teléfono desde diciembre. Por lo menos me respondes un post», acompañado de un emoji de sonrisa.
Esta no es la primera vez que los funcionarios municipales se muestran sensibles a las críticas respecto a la gestión de Bettina Romero. Como tampoco Lamas, no es la primera que reclama que Agustina Gallo que supo ingresar al municipio de la mano de Gustavo Sáenz, no tiene siquiera la delicadeza de responder con un dedito para arriba, a la hora de recibir mensajes.
La disputa facebookera luego fue eliminada por ambas funcionarias ( no sin que antes captáramos los mensajes), mientas la edil Romina Arroyo continuaba abocada a la consulta de vecinos que siguen sin entender quién planificó las bicisendas sin la planificación adecuada .
Comments