Aunque las provincias lograron revertir el déficit fiscal en 2024, el Gobierno nacional busca avanzar con nuevos recortes y una eventual suba de retenciones que ya encendió alarmas entre los mandatarios del centro del país.
En un clima cada vez más tenso entre la Casa Rosada y los gobernadores, volvió al centro de la escena la discusión por las retenciones al agro. Javier Milei, decidido a profundizar el ajuste fiscal para alcanzar un superávit primario del 1,6% del PBI, reactivó el debate al advertir que las alícuotas subirán tras la rebaja transitoria y presionar al sector para que acelere la liquidación de divisas.
Los gobernadores de la Región Centro —Martín Llaryora (Córdoba), Maximiliano Pullaro (Santa Fe) y Rogelio Frigerio (Entre Ríos)— ya habían frenado un intento del ministro Luis Caputo de subir las retenciones en la primera versión de la Ley Bases. Lo hicieron en defensa del campo, motor productivo de sus provincias y aliado electoral. Ahora, la resistencia vuelve a crecer.
“Maxi no va siempre al pie; fija límites”, reconoció una fuente cercana a los mandatarios que se definen como “dialoguistas”, pero no alineados incondicionalmente con el Gobierno nacional.
Mientras tanto, en el Congreso, un sector opositor busca impedir la suba de los derechos de exportación. Los diputados cordobeses Alejandra Torres y Carlos Gutiérrez —ambos del schiarettismo y con el aval de Llaryora— presentaron un proyecto para limitar cualquier incremento antes del 30 de junio. La iniciativa complica a los libertarios y a sus socios del PRO y la UCR.
Las provincias ajustan, pero reclaman
Pese a la caída de ingresos, las provincias consiguieron revertir el rojo fiscal: pasaron de un déficit de 0,3% del PBI en 2023 a un superávit de 0,1% en 2024, según el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF). Este resultado se explica por una fuerte reducción del gasto público total, que cayó 14,8% interanual en términos reales, y por un descenso de los ingresos del 12,7%.
Solo seis distritos registraron déficit fiscal global: Buenos Aires, Catamarca, Chaco, Tierra del Fuego, Río Negro y Entre Ríos. La mayoría de las demás provincias —20 en total— lograron mejorar sus cuentas, aunque con fuertes recortes y sin aportes significativos de Nación.
Sin embargo, los gobernadores advierten que los márgenes de ajuste se achicaron y exigen reactivar la obra pública. También alertan por el impacto de la falta de inversiones en infraestructura sobre la competitividad de las economías regionales.
Reforma tributaria sin plazos
En el acuerdo con el FMI aparecen planteadas reformas clave, como la eliminación de impuestos distorsivos como Ingresos Brutos y la modificación del régimen de coparticipación. Pero no hay plazos concretos ni compromisos inmediatos.
La expectativa está centrada, por ahora, en aliviar los regímenes de percepciones anticipadas, como el Sircreb. Mientras tanto, Milei anunció que la Nación establecerá “un piso mínimo para cada impuesto”, y que las provincias podrán elevarlo, fomentando así “una competencia fiscal”.
Los libertarios interpretan este esquema como una vía para avanzar en la reforma de la coparticipación a través del Congreso, sin necesidad de aprobación en las legislaturas provinciales. Pero ese planteo ya genera rechazo: modifica el mecanismo previsto por la Constitución Nacional para este tipo de reformas.
Comments