Dos hombres de 33 y 47 años fueron imputados por robos agravados cometidos en fincas rurales de Campo Quijano, donde actuaban con violencia, dañaban las instalaciones y se llevaban distintos elementos. Uno de los acusados era empleado de una de las víctimas.
El fiscal penal de Rosario de Lerma, Daniel Escalante, los imputó por dos hechos de robo agravado en concurso real, tras una investigación que incluyó testimonios, análisis de geolocalización, registros digitales e informes periciales.
En uno de los casos, los intrusos forzaron puertas, ventanas y alarmas en una vivienda rural, mientras que en el otro rompieron el alambrado del gallinero y sustrajeron un compresor de aire y una balanza, usando una moto para escapar.
La investigación avanzó cuando la víctima descubrió que su propio empleado ofrecía el compresor robado en venta. Además, la expareja de uno de los acusados entregó mensajes de WhatsApp y Messenger, donde este admitía su participación y detallaba que había consumido alcohol y drogas antes del robo.
Ambos sospechosos tienen antecedentes por delitos contra la propiedad, y el fiscal pidió que continúen detenidos mientras sigue la causa.
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